Luego de la competencia de equipos en la que los concursantes debieron vérselas con las langostas y el chocolate, Fernando Arau y Cynthia Olavarria debieron enfrentarse para decidir quién se quedaba y quién se iba.
La competencia no fue fácil, porque aunque los jueces pidieron solo un bocadillo que se pudiera preparar en media hora, Cynthia se dejo llevar por los nervios. Estaba tan nerviosa que casi no puede abrir la lata de frijoles.
Eso, los frijoles fueron los que al final le cerraron la puerta de la competencia, porque cuando estuvieron listos, aunque buenos de sabor, estaban un poco duros.
Mientras tanto Fernando Arau, con la seguridad que lo caracteriza, a pesar de haber arruinado la langosta, se salvó con un plato a base de higos que le dio la victoria.
Los jueces rescataron la creatividad de su receta y lo arriesgado que había sido mezclar los diferentes sabores.
Al final, Cynthia debió entregar su uniforme de chef y conformarse con una gorra de ayudante. Juntos regresaron a la casa, donde sus compañeros los esperaban emocionados y allí, como cosa muy rescatable, Fernando aseguró que por primera vez no le había dado gusto ganar. ¿Será verdad?
