LOS ÁNGELES (California) - Propietarios e inquilinos de viviendas en Los Angeles deberán compartir por partes iguales los gastos de adecuarlas a los sismos, bajo un acuerdo aprobado por el concejo municipal.
El acuerdo, aprobado unánimemente, permite a los dueños de inmuebles a transmitir la mitad de los costos de adaptación a los inquilinos por medio de aumentos de las rentas a lo largo de 10 años, con un aumento máximo de 38 dólares mensuales.
El diario Los Angeles Times dijo que la votación se realizó después de un año de estudios y discusiones, y que la ciudad podrá empezar a poner en práctica las leyes antisísmicas más amplias del país.
El año pasado el concejo aprobó normas que afectan a miles de edificios antiguos de madera y cemento, que podrían derrumbarse en caso de un temblor fuerte.