Dos trabajadores de un almacén en Torrance se convirtieron en héroes al salvar a un hombre mayor de edad quien se quedó inconsciente dentro de su furgoneta la cual se prendió en fuego.
Eduardo Flores y Robert Ybarra lograron socorrer al hombre cuando se percataron del incendio para ir prontamente a sacar al sujeto del interior del vehículo y ponerlo a salvo. Luego esperaron por la ayuda concerniente y la llegada de los familiares del individuo.
Fue el pasado mes de noviembre cuando Flores y Ybarra se encontraban en una luz roja en Medical Center Drive. De pronto vieron a un conductor en problemas.
"Estábamos regresando de una entrega al hospital Torrance Memorial y vimos una furgoneta en llamas", dijo Ybarra.
La furgoneta estaba estancada en medio del concurrido bulevar Lomita y se percataron de que un anciano se encontraba adentro pero no respondía.
"Estábamos golpeando la ventana", dijo Ybarra a quien también se les unió un oficial de seguridad fuera de servicio para ayudarlos.
"Las llamas estaban llegando por el fondo.", contó. "Saqué al hombre, le quité el cinturón de seguridad y lo agarré por debajo de sus hombros y el oficial agarró los pies", dijo Ybarra.
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Flores añadió: "Lo sacamos y lo sentamos en unos escalones".
Luego arribaron el departamento de policía de Torrance, el departamento de bomberos para controlar las llamas.
Debido a este rescate, Flores e Ybarra, quienes trabajan registrando, ordenando y entregando paquetes en el almacén, fueron honrados por Torrance Memorial con un premio por personas extraordinarias.
Ahora estos dos buenos samaritanos cargan con orgullo y humildad todos los días en sus hombros los pequeños "pins" que les otorgaron por su acto heroico.
"Yo haría esto para cualquier persona en problemas.No lo hice para ser reconocido.Podría haber sido el padre de alguien, el abuelo de alguien, papá, cualquiera. Si tenemos la oportunidad de ayudar a alguien en la vida, creo que hice lo correcta entonces. "
Mientras,una mancha de aceite en la calle todavía marca el lugar donde la camioneta se incendió para dar paso a el acto noble y heroico de estos dos buenos samaritanos.
