LOS ÁNGELES (California) - Luego de que viajara hasta Roma y hablara con el Papa con el fin de pedir el alto a la deportación de su padre, la niña Jersey Vargas, de 10 años de edad y residente del área de Los Ángeles, ha recibido buenas noticias.
Y es que en una afortunada casualidad, su padre indocumentado, originario de México, podría salir bajo fianza y salvarse de la deportación.
“Podemos comprobar primeramente y más importante, que es una persona de buena conducta moral, que ha estado aquí por más de 10 años”, manifestó Alex Galvez, abogado de inmigración, quien está trabajando en el caso de Mario Vargas, padre de la niña.
Galvez destacó que Vargas tiene tres hijos ciudadanos, que uno de sus hijos tiene acción diferida y que una hija indocumentada podrá acogerse también a la acción diferida el próximo año.
La niña Jersey Vargas viajó junto a un grupo de unos 15 inmigrantes latinoamericanos, la mayoría de Los Ángeles, que acudió a la audiencia general del Papa Francisco en la Plaza de San Pedro.
La niña le pidió al Papa que intercediera por ella con el presidente Barack Obama para que evitara la deportación de su padre.
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